El mundo de los alimentos y sus nutrientes es muy
amplio, pero uno de los grupos más conocidos es el de las vitaminas, por eso
hoy vamos ha hablar sobre una de las mas famosas, la vitamina D.
Científicamente la vitamina D es un heterolípido
insaponificable del grupo de los esteroides.
Es una definición un poco compleja pero que quiere
decir que es una “grasa” que no contiene ácidos grasos en su estructura.
Estructura química de la vitamina D |
(Es verdad que varias moléculas pueden desarrollar la función
de la vitamina D, pero esta es un ejemplo de la más común.)
Y aunque la definición esta bien para ampliar nuestra
cultura, vamos a ver que efectos tiene en el organismo y donde la podemos encontrar.
Lo primero que debemos saber es que necesitamos
consumir vitamina D porque nuestro no la sintetiza, y es necesaria para
diferentes funciones. Pero un aporte excesivo de vitamina D tampoco es bueno, lo
mejor es tomar una dieta rica y variada para no tener que preocuparnos, sin embargo,
a veces eso no es suficiente y debemos tomar suplementos con lo que se debe
tener cuidado.
Las cantidades recomendadas, mas que nada por
curiosidad son:
Nacimiento hasta 12 meses: 400 UI
Niños entre uno y 13 años: 600 UI
Adolescentes entre 14 y 18 años: 600 UI
Adultos de 19 a 70 años: 600 UI
Adultos mayores de 71 años: 800 UI
Mujeres embarazadas y lactando: 600 UI
(UI- unidades internacionales)
¿Y porque es importante tomar vitaminada D?
Porque su función es la de la absorción de calcio, además
que juega importantes papeles en el sistema nervioso, muscular e inmunitario.
Si nuestro cuerpo tiene carencia de esta vitamina
puede sufrir diversas patologías como osteoporosis, osteomalacia, hipocalcemia
en adultos.
Una falta de vitamina D también puede estar ligada a
enfermedades crónicas como el cáncer, dolor crónico, debilidad, fatiga crónica,
enfermedades autoinmunes como la esclerosis múltiple, la hipertensión arterial,
enfermedades mentales, enfermedades del corazón, artritis reumatoide,
psoriasis, tuberculosis y enfermedad inflamatoria del intestino.
En los niños se manifiesta con raquitismo.
También hay que tener en cuenta que un exceso puede
ser toxico y afecta a nuestro riñón o aumentar el calcio en la sangre.
¿Y como podemos obtener vitamina D?
La primera opción es en una dieta rica, pero los
alimentos que más la contienen son yemas de huevo, pescado de agua salada e
hígado. Aunque también hay alimentos enriquecidos como la leche y los cereales.
Otra manera es por mediación del sol, ya que sus rayos
nos ayudan a sintetizarla a partir de los lípidos. Pero se debe tener cuidado
con la exposición al sol, ya que puede provocar cáncer de piel.
También existen los suplementos, pero es mejor
tomarlos con precaución y con recomendación médica.
Pues ya veis que la vitamina D es muy importante, pero se debe tener
cuidado y aportar para cubrir las necesidades de cada persona, lo mejor como
con todos los alimentos y sus nutrientes es aportarlo en una dieta rica y
variada.
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